EL CORAZÓN DE MI PATRIA.

No pensé que escribiría un nuevo post a solo dos días de haber publicado el último, en realidad pensaba que el siguiente sería el dedicado al Día Internacional de la Mujer - que ya estoy preparando por cierto-, pero muchas veces Dios te cambia los planes así, de repente. Este nuevo post lo titulé "El corazón de mi Patria" para tratar de explicar el cómo me siento y lo que pienso que deben sentir muchas de las personas que forman parte de mi Patria, Venezuela, ante la muerte del Presidente Hugo Rafael Chávez Frías.

 

Estos han sido días de suma incertidumbre en mi país, y quizás en el mundo entero ante tantos comentarios, buenos y malos, sobre el estado de salud del Presidente Chávez: aún vive, está muerto desde que llegó de Cuba, la enfermera lo vió en el hospital militar, está intubado, está mal, se reunió con sus ministros durante 5 horas, firmó nombramientos, está haciendo ejercicio y recuperándose, entre miles de comentarios que fueron transmitido por los medios de comunicación, la internet y las redes sociales. Incertidumbre que hacía que lo primero que se preguntaba en mi casa a la hora del desayuno fuera: "¿qué ha pasado con Chávez, se murió? y la respuesta era la misma: "ni idea, nadie sabe"... y ese "nadie sabe" era interpretado por mí como lo peor que podíamos responder en la casa, pero no había respuesta, nadie sabía realmente cuál era el estado de salud del presidente de mi país.

 

La confirmación del fallecimiento del presidente Chávez la recibí en el aeropuerto, un poco más de las 5.15pm de hoy, cuando comenzaron a llegarme mensajes a mi teléfono celular con la noticia. En ese instante me dispuse a conectarme al twitter y allí descubrí que era cierta...en ese instante la noticia fue tema de conversación entre todos los presentes en la llegada nacional del aeropuerto La Chinita... la gente comentaba, pero estaba tranquila. No puedo decir que tuve el honor o la desgracia de conocer al Presidente Chávez en persona, pero si tuve la oportunidad de recibirlo un par de veces cuando visitaba un medio de comunicación para el cual trabajaba. Nunca me gusto su aspecto, su mirada nunca me inspiró confianza pero si puedo decirles que era un hombre amable al saludar, muy desconfiado y que causaba un "no se que" entre las personas adeptas o no a su filosofía política cuando lo veían llegar.

 

Hoy, al confirmar su muerte, me pregunto cómo estará el corazón de mi Patria, de mi gente, ante la partida del Presidente Chávez. Pienso que el corazón de muchos de los venezolanos estará triste, sentido por la pérdida de su líder, de su "héroe" mientras que para otros el corazón estará alegre, feliz... En este momento puedo contarles que mi corazón siente la partida de un ser humano que merece respeto sólo por el hecho de serlo, más mi corazón no lo llorá como lloró el cierre de RCTV, la muerte de 19 venezolanos en el suceso del Puente Llaguno el 11 de abril de 2002, la muerte del Franklin Brito el 30 de agosto de 2010 en el Hospital Militar de Caracas y tantos otros sucesos que han ocurrido durante los 14 años que gobernó el Presidente.

 

Pienso que el corazón de mi Patria en este momento debe respetar el duelo que embarga a la familia Chávez solo por el hecho que muere un ser humano, venezolano, como nosotros. Sé lo que su familia y sus amigos más allegados deben estar sintiendo porque he vivido, muy de cerca, la muerte de seres queridos a causa de un cáncer, y todo el que pase por ésto debe saber que no es fácil...

 

El corazón de mi Patria debería, en este momento, unirse en un solo color: el tricolor de Bandera Nacional y apostar por una Venezuela unida donde reine la armonía, la paz y el perdón... una Venezuela libre y llena de esperanza, una Venezuela que trabaje junta y salga pa'lante. El corazón de mi Patria, debería ser un corazón libre y lleno de amor para continuar luchando y viviendo por la Venezuela que todos merecemos... y como lo dijo el mismo Presidente Chávez durante la tragedia de Amuay: "lamento mucho lo sucedido, pero el show debe continuar"... ¡Venezuela, adelante!. Así pienso, Así soy.